viernes, 21 de diciembre de 2007

Es cierto, por aquí hace rato no se despeña ni una idea.
Es que “hace miedo”.
Miedo de aquel que ya me había olvidado, casi.
Entonces, con este cascote en la boca del estómago y hormigueo de pánico trepando por la garganta me aviso: Cuando tenga alguna puta noción de cómo seguirán nuestras vidas vuelvo. Cuando amaine la incertidumbre, para bien o para mal, sigo con este bulo virtual.
Porque me hace bien, porque lo voy a necesitar.
Porque me cago en algo y todavía no se bien en que. Sep, creer en dios un día como hoy me sería de enorme utilidad.
Una lástima pensar tanto todo.
Pero bueno, es lo que hay.

3 comentarios:

Natalia J. dijo...

no sé si es tan útil creer en dios, complica más las cosas. Yo lo sé.
saludos!

Tapi dijo...

Aunque no creamos en el,generalmente cuando andamos desorientados lo invocamos.
No esperemos que Dios nos de la solución.Saludos.

Lady Kelvin dijo...

Apo: asi es amigo, complica si Ud. lo piensa mucho (como es mi caso), de lo contrario parece ser comodísimo. A mi no me sale....

Tapi: no espero nada, ni he pedido nada, ni antes de estos dias difíciles ni ahora. Pero respeto a quienes se mantienen en sus creencias. No es mi caso. Saludos y gracias por el comentario.